domingo, 14 de septiembre de 2008

Nada de nada

Alguna vez fui, a veces soy, muchas veces a pesar de parecer no soy ni un poquito y conste que quiero ser pero no puedo, no me dejo, me lo impido, me pregunto y me re pregunto…¿Para que?...y vuelvo a ser nada, a parecer nadie, a esconderme en el silencio del desconocido viajero ermitaño espacial vagabundo de la nada, pregonando nada y enseñando nada. Y a pesar de todo sigo esperando que alguien me diga que entiende esta nada llena de nada, inexplicable y que se confunde con abandono de personas, con abandono de amigas y cariños, con abandono de esa necesidad de forjar nuevos recuerdos, futuros antecedentes de nuevos diálogos que alguien quizás quiera oír, alguien se interese compartir conmigo. Hoy no hay nada que contar más que lejanos recuerdos que parecen ser lo único para rescatar de mi existencia y eso me preocupa aunque parezca que no, aunque es mi estado de nada el que se demuestra, el que parece la pantalla de mi vida profunda ¿Es tan difícil entender esto?...¿es tan difícil comprender que cuando no hay nada, nada se puede demostrar?... ¿es tan difícil entender que el silencio no siempre dice nada?...que puede haber algo que no se puede decir porque no hay manera de hacerlo, como querer ejemplificar el rostro del aire que sabemos que está pero de manera incorpórea, pero a pesar que no se ve, es necesario. Soy como ese aire, incorpóreo, intangible, solo demostrable en la llama de una vela, pero yo no puedo demostrarme como quieren que lo haga. Y eso me confunde, me vuelve más huraño, más silencioso, más invisible. Y eso les asusta, no comprenden ¿Es tan difícil?

2 comentarios:

Chiqui Abreu dijo...

Al principio de este texto dices que quieres ser, pero no puedes, no te dejas, te lo impides; muchas veces sentimos caer en un vacío, creemos que no hay NADA que nos haga salir de él, pero las vías de escape las trazamos nosotros mismos, como lo haces tú en estas letras, en el silencio, en tus poesías llenas de luz. No es difícil entender que alguien pueda sentirse así, lo difícil (imposible, creo...) es que quienes nos quieren no hagan todo lo que puedan para alentarnos a seguir, para cubrir esa nada, para llenar los huecos que nos va dejando ese tiempo que no vale nada si no es vivido, y vivir implica ser parte de otros, esquivando la nada, o por lo menos intentarlo.
Eres un ser maravilloso, así te respiro, en las palabras, en los silencios y hasta en la lluvia. Sé que no es nada, pero mi mano siempre estará aquí, frente a ti, para sostenerte en la nada o ayudarte a salir de ella, esa decisión no me corresponde...
Besos, abrazos y TODO mi cariño!
Chiqui.-

Daniel dijo...

Esta locura nació de un permanente reclamo por mis silencios, nadie que no los tenga los podrá entender; los que me reclamaban eran sordos y no oían la necesidad casi involuntaria de callar, menos entendían que no era porque estuviese mal, sino simplemente porque no había nada para decir o solamente una manera de verme por dentro. A demasiada gente le gusta el ruido, a mi no.
Te quiero mucho y sé que estarás para oir mis silencios y yo para los tuyos.

Mil besos (son muchos?)