A esta razón
infinita de anestesiar la rueda
la alimento con
partes sobrantes de un todo ebrio;
quise ver la luz
debajo del lodo y encontré un fragmento extraviado,
un rayo de incertidumbre, un sinónimo de espejo;
calvicie brutal, abstracto túnel sin luz en mi delirante viaje;
quise la muerte y encontré un pasaje;
quise respirar entre anhídridos y encontré un recodo,
induciendo un viaje con retorno
al mismo punto de la circunferencia.
No hubo escapatoria;
un rayo de incertidumbre, un sinónimo de espejo;
calvicie brutal, abstracto túnel sin luz en mi delirante viaje;
quise la muerte y encontré un pasaje;
quise respirar entre anhídridos y encontré un recodo,
induciendo un viaje con retorno
al mismo punto de la circunferencia.
No hubo escapatoria;
tuve que regresar
a esta muerte cotidiana,
a esta ceguera irrevocable del instinto,
allí donde los corruptos predicen
sus mágicas antesalas del infierno.
allí donde los corruptos predicen
sus mágicas antesalas del infierno.
Hubo un tiempo, una huelga de vida:
sumisión a derecho, a placenta contaminada,
que condena a un circular renacimiento;
en definitiva: un fiasco de momificadas telarañas.
sumisión a derecho, a placenta contaminada,
que condena a un circular renacimiento;
en definitiva: un fiasco de momificadas telarañas.
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